Puigdemont enviará una carta a Ana Pastor para explicar el referéndum en el Congreso sin votación
El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, señaló este lunes en una entrevista que esta semana enviará una carta a la presidenta del Congreso de los Diputados, Ana Pastor, para anunciarle que explicará el referéndum en la Cámara pero sin que haya votación posterior.
#President @KRLS: “Aquesta mateixa setmana enviaré una carta a la presidenta del @Congreso_Es per explicar el nostre projecte” @elmonarac1
— Govern. Generalitat (@govern) 12 de junio de 2017
En la misiva, Puigdemont preguntará a Pastor si acepta estas condiciones y se muestra confiado en que acudirá al Congreso antes de verano. El presidente de la Generalitat quiere así explicar su hoja de ruta independentista sin tener que pasar por la votación de todos los grupos que se produce siempre justo después de su intervención.
Según el reglamento de la Cámara, Puigdemont tiene dos opciones para presentar su hoja de ruta en el Congreso y las dos terminan en votación. La primera consistiría en registrar en el Parlament una proposición de ley solicitando la reforma de la Constitución, y la segunda consiste en que el presidente de la Generalitat defendiera su proyecto mediante la reforma del ‘Estatut’.
Desde el Gobierno de Mariano Rajoy recuerdan que para debatir sin necesidad de que haya votación, Puigdemont tiene la comisión general de Comunidades Autónomas del Senado. Aquí es donde puede plantear el debate que quiera sin que termine en votación.
Sin embargo el dirigente catalán rechazó esta vía en su momento, tal y como recordó el portavoz parlamentario del PP, Rafael Hernando: «Prefirió acudir a un salón alquilado en el Ayuntamiento de Madrid a dar una conferencia, donde no podía tener en frente a nadie que le rebatiera».
Los mecanismos del Estado
El delegado del Gobierno en Cataluña, Enric Millo, advirtió este lunes al presidente catalán de que si no rectifica en su hoja de ruta antes del 1 de octubre, quedará «invalidado como interlocutor», y ha recalcado que, ante sus «amenazas y ataques», el Estado tiene mecanismos para «defenderse».
Millo dijo que el domingo 1 de octubre, fecha anunciada para el referéndum sobre la independencia, será «un día normal porque se comprobará que las cosas que dice el Govern no eran ciertas», pero generará una «gran frustración».
Si bien apuntó que el día después de esa fecha habrá que continuar utilizando el diálogo como «moneda única y válida», Millo señaló al Govern de que «si no hay rectificación antes del 1-O, el día después habrá un cambio de interlocutores», pues «los interlocutores que hayan llevado a Cataluña a este callejón sin salida no serán interlocutores válidos para seguir dialogando».
El delegado del Gobierno acusó a la Generalitat de «irresponsable», por su actitud «de ir contra la democracia y la legalidad vigente, saltarse las leyes, no obedecer sentencias de tribunales, romper el sistema competencial de la Constitución y el Estatut», en lo que es un «aviso de desobediencia clarísimo».